martes, 26 de octubre de 2010

Bienvenidos al encuentro con la magia de nuestro folklore andino

PARA CONOCER!!!
La palabra folklore nació en el siglo XVII, por un hombre dedicado a guardar cosas antiguas, un día se le ocurrió que había haber una palabra  para todo aquello que los pueblos transmitían a través de los tiempos, e hizo la unión de dos vocablos: FOLK: pueblo y LORE: sabiduría; folklore es la sabiduría o el saber de un pueblo. Hemos  de aclarar que este saber es una forma oral, tradicional, de una generación a otra.
Ahora bien, no toda tradición es folklórica sino tan solo aquella que reúna ciertas características fundamentales:
  •    Que sea Anónimo, o sea, que su creador sea desconocido, nadie sabe quien lo hizo.
  •    Que no sea Institucionalizado, o sea, que no se necesita ir a una escuela para aprenderlo.
  •    Que sea Funcional, esto quiere decir que cumpla con una necesidad.
  •    Su Ancianidad, o sea, su Antigüedad, que no se puede precisar su edad.

Al cumplir éstas características el folklore lo podemos encontrar en cuatro etapas:
  •   Naciente, o sea, empezando a vivir.
  •    Vivo, en su apogeo.
  •    Decadencia, o sea, de poco uso.
  •    Muerto, aquí llega a llamarse historia.

Folklore Poético: Que comprende los romances, canciones, refranes, coplas, adivinanzas, dichos, etc. Folklore Mágico: Lo espiritual, las supersticiones, y la misma magia.



En países como el nuestro no nos basta lo anterior, pues el fenómeno folklórico se halla presente en todas las etapas sociales, desde las más altas jerarquías, hasta los grupos más bajos; por tanto, es un fenómeno de carácter colectivo, diferenciado socialmente, y que conlleva todas las circunstancias cotidianas de la vida del hombre.